La ‘emperatriz’ de las mariposas
“Mi gran sueño es que en Colombia no solo se hable de café y flores, sino también de la variedad de mariposas”
Su gran amor por las mariposas la ha llevado a estudiar, investigar, conocer y hasta cultivar mariposas en el Atlántico.
Ella es Zulma Velásquez, emprendedora nacida en Jerusalén, Cundinamarca, que llegó a Barranquilla hace 21 años, con su esposo Abelardo Acevedo, santandereano. Y en esta ciudad crecieron sus 3 hijos, Iván, Camila y Juliana, todos vinculados al Solar de Mao, donde funciona el mariposario, y donde ella ha depositado sus sueños como mamá y empresaria.
‘El Solar de Mao’ es una granja eco campestre ubicada en el municipio de Galapa, a 15 minutos de Barranquilla. Allí se encuentra su gran mariposario, el primero en la región Caribe y el cual construyó gracias al acompañamiento y asesoría de expertos de la Asociación de Lepidópteros de Colombia, con quienes desarrolló diferentes investigaciones sobre este insecto vistoso e inofensivo.
A partir de estas investigaciones pudo descubrir cómo ayudar en la construcción de un ecosistema especial para la reproducción de esta especie en un ambiente como el de la región norte del país que puede ser comparada con características propias de un bosque seco tropical.
Este amor por las mariposas nació desde muy niña, gracias a todas las experiencias que vivió al lado de su mamá, quien la llevaba junto con sus hermanos a ver mariposas en el jardín; un plan familiar de los domingos por las tardes.
Enamorada de sus colores, de su vuelo y de su libertad, Zulma comenzó a ver en su hobby favorito una oportunidad o proyecto de vida.
Ha sido líder de varios importantes negocios en Barranquilla, desde los cuales priman el amor por la naturaleza, la reconexión de lazos familiares y el regreso a los inicios de todo colombiano, inicio que aparecen en el campo.
Además de su gran amor por las mariposas Zulma se considera una ecologista de primera.
Ahora sueña con llevar este proyecto a otro nivel, con una apuesta ambiciosa y sobre todo de marca país. Desea llevar la gran variedad de mariposas que existe en nuestro país a otros lugares del mundo.

«Colombia es el primer país con mayor diversidad de mariposas y tenemos la capacidad de poder exportarlas creando las condiciones necesarias para que sobrevivan en otros ambientes; sería una gran oportunidad como biocomercio. Otro producto para exportar».
Zulma es una mujer que no se rinde. Es incansable cuando se propone una meta.
Siente que el mariposario es un valioso regalo para el Atlántico, porque ella ha repoblado las mariposas ‘monarcas’, que son anaranjadas, blancas y negras. Son las más bellas representantes colombianas para exportar porque son nobles, se comportan bien, tienen buen apareamiento y su vuelo es pausado.
Las mariposas tienen entre tres y seis meses de vida. Son polinizadoras por excelencia como las abejas. Ayudan a preservar los bosques.
Zulma también trabaja duro para dejar un legado: un libro donde las personas puedan estudiar más sobre las mariposas, más específicamente con las que tiene en ‘El Solar de Mao’.