La revista digital La Ola Caribe registra con beneplácito e inmenso orgullo esta noticia que enaltece al destacado barranquillero por su valioso aporte al periodismo en Iberoamérica. La entrega del galardón coincide con la celebración de los 30 años de la Fundación Gabo.
El reconocimiento, entregado por la Universidad de Columbia, destaca su liderazgo en la promoción de la ética, la formación y la excelencia periodística al frente de la Fundación que creó junto a Gabriel García Márquez hace 30 años.
En una ceremonia celebrada en la Universidad de Columbia, en Nueva York, el director general y cofundador de la Fundación Gabo, Jaime Abello Banfi, recibió una Mención Especial del Premio Maria Moors Cabot por su aporte a la libertad de prensa y su liderazgo en la promoción de la ética, la formación y la excelencia periodística en Iberoamérica.
Este importante reconocimiento es recibido en un año significativo para la Fundación Gabo, que celebra sus 30 años de existencia dedicados al fortalecimiento del periodismo en la región. Fundada en 1994 por Gabriel García Márquez y Abello Banfi, la organización nació de la motivación del nobel colombiano por crear un espacio donde los periodistas pudieran perfeccionar su oficio, compartir experiencias y reafirmar su compromiso con la sociedad.
Tras la invitación de García Márquez, Abello convirtió aquella visión en una institución viva que -desde su sede en Cartagena- hoy no solo trabaja para fortalecer y promover la labor de miles de periodistas en Iberoamérica, sino que también ha ampliado su horizonte hacia la educación mediática, para estimular la creatividad entre niños y jóvenes como apuesta de presente y futuro, así como a la creación de espacios de conexión con audiencias más amplias a través de la cultura.
Bajo el liderazgo de Abello Banfi, la Fundación ha impulsado talleres, festivales, conferencias, premios, becas, publicaciones y programas de formación que promueven la ética, la excelencia periodística, la innovación narrativa y la apertura de espacios de debate sobre los retos actuales del oficio.
Durante el anuncio del reconocimiento la Escuela de Periodismo de Columbia destacó “las contribuciones de Abello al entendimiento interamericano y su papel en la creación de una comunidad periodística que ha sabido mantener la independencia y el rigor incluso en contextos adversos”. Además, el jurado subrayó que su trayectoria constituye una contribución extraordinaria al periodismo en América Latina y a los valores democráticos que lo sustentan.
Un galardón que, por generaciones, ha tejido la memoria común del periodismo en las Américas
Creado en 1938 por Godfrey Lowell Cabot en memoria de su esposa, el Premio Maria Moors Cabot es el galardón internacional más antiguo en periodismo y distingue a quienes contribuyen al entendimiento entre las Américas. En su edición 2025, el premio otorgó Medallas de Oro a Natalia Viana (Brasil), miembro del Consejo Rector de la Fundación Gabo; a Omaya Sosa Pascual (Puerto Rico), quien este año fue jurado del 13º Premio Gabo en la categoría Texto; a Nora Gámez Torres (EE. UU.) e Isabella Cota (México), además de una segunda Mención Especial a Paola Margot Ugaz Cruz (Perú).
La distinción a Jaime Abello demuestra el interés del jurado en reconocer a figuras iberoamericanas que, desde sus contextos locales, han tenido impacto internacional. En el caso de Abello Banfi, su liderazgo al frente de la Fundación Gabo ha proyectado desde Colombia una visión de periodismo como bien público y como herramienta de transformación social, fiel al legado de su fundador.
Durante su discurso de aceptación, Abello agregó que desde la institución que dirige, su compromiso hacia el futuro es precisamente “mantener al periodismo como un bastión de la libertad de expresión, el pensamiento crítico y el humanismo, en un momento en que el autoritarismo vuelve a crecer, los liderazgos corruptos y criminales ganan terreno, y el avance descontrolado de la inteligencia artificial amenaza con imponer una hegemonía del conocimiento sin supervisión sobre sus enormes riesgos”.
Treinta años después de su creación, y gracias a reconocimientos como este, la Fundación Gabo continúa apoyando a contadores de historias de toda Iberoamérica para alcanzar una sociedad mejor informada, participativa y libre, y para mantener vivo el mejor oficio del mundo.
Tomado de la Fundación Gabo
