Novelista creadora de realidades mágicas
Colaboración de
Félix Carrillo Hinojosa
Su tierra en la dinámica social que vive, es una sola y muchas más al tiempo. Por un lado está, la que se debate en el oscurantismo, fanatismo de todo tipo, extrema pobreza, choques diarios entre ellos, mientras un minúsculo sector se levanta, poderoso, opulento, despilfarrador y dueño del poder regional. Mientras uno adula, el otro somete.
Allí entre tanta diversidad, nació en el sur de ese departamento, una niña que le inquietó siempre, escribir. Mientras hacía palomitas de papel y se imaginaba un mundo entre nubes, la primaria y el bachillerato pasó raudo, para enfrentarse a varios retos que surgieron sin buscarlos. Ser candidata en un reinado del café, en una tierra desconocida y tener que decidir sobre la marcha, ante el incendio de su carroza, que la hizo despertar y seguir a pie un desfile atiborrado de tantos seguidores, para ser ganadora sobre el conocimiento de un producto que se cosecha, en las estribaciones frías de su enigmático territorio. Esa experiencia vivida hace más de cinco décadas, es la misma que se sumó a sus estudios de Comunicación Social con énfasis en Periodismo en la Universidad Javeriana con sede en Bogotá.
Sin olvidar lo que significó su niñez y adolescencia, momentos que le marcarían para recoger de la mejor manera, cada escenario de esa geografía que cambia cada metro que se recorre. Su pincel, logró narrar la idiosincrasia de todos los pueblos, con un lenguaje agradable y ágil, con variados ritmos y un humor que aflora en cada personaje, que se auto-refencia así mismo
Su primer asomo literario fue la novela ‘Algún día brillará el sol’ en 1977, que conoció su vida pública a través de una impresión y circulación limitada. Su cuento ‘Sálvese quien pueda’, empezó a hablar por ella, que a través de la crítica reconoce, que hay una naciente escritora, de un pueblo olvidado que puede representarlo en su nueva narrativa.
En 1986 con ‘San Tropel Eterno’, obtuvo el tercer lugar en el Concurso Nacional de Novela, que el grupo editorial Plaza & Janes organizó, que le permitió un año después, ser adaptada para Televisión por Caracol Televisión, con un reconocimiento nacional, vendida en varios países, entre ellos, España y ganar el Premio de Periodismo Simón Bolívar como mejor argumento adaptada a televisión. Igual suerte vivió en 1989, con la novela ‘¡Mandinga Sea!’, por parte de ese sector editorial.
Su obra literaria ‘Retratos bajo la tempestad’, fue una de las veinte obras finalistas, en el concurso de Novela organizado por Planeta España en 1993, que fue publicada en Colombia por el grupo editorial Intermedio en 1995.
En el 2001 se publicó por intermedio de IM Editores, ‘El Ángel del acordeón’, su quinta novela, que le permitió a su hija llevarla al cine y ganarse el premio que otorga el Fondo para el desarrollo Cinematográfico del Ministerio de Cultura.
En el 2012 aparece su sexta novela ‘Al volver del cielo’, donde reafirmó sus cualidades literarias narrativas, nominada al Premio Nacional de Periodismo CPB y editado por la editorial Planeta.
Su tiempo está repartido entre varios proyectos, uno, el de escribir hasta que las musas inspiradoras fluyan, otras, sugerir a la nueva generación, una apertura en la búsqueda de nuevos caminos, para poder construir diversas miradas frente a la lectura y escritura, respetando lo que existe y creando nuevos retos.
Cada trazo de su narrativa recoge lo cotidiano, sumado a los elementos, a veces poco perceptibles, que conducen a un mundo abstracto. Su obra, está permeada por la influencia del realismo mágico, que hace parte de su entorno. Ese estado surrealista le permite afectar a sus personajes, con comportamientos que no están lejos de esas maneras de vivir sus vidas la gente del común, que en la mayoría de los casos no transcurren de manera lineal.
En su obra hay un sarcasmo natural, que su pueblo produce como quien se lleva la comida a la boca. Esa contradicción que surge, al contemplar que “lo malo trae su algo bueno”, no es más que el resultado que nace de la retórica popular, llena de sabiduría y sentido común, que suple la rimbombante posición de ciertos sectores de la intelectualidad nacional, que no pierde tiempo en desdeñar lo popular y popularizado que tienen nuestros pueblos.
Varios estudiosos de la literatura y de la novela en formación, han planteado varias miradas sobre su creación literaria.
En ella, hay aprendizaje y también elementos de madurez, que la crítica subjetiva por demás, aborda como lobo feroz.
Esas posturas de mujeres y hombres, en la estructuración de nuevas visiones de la Literatura, gestan unas idealizaciones sociales, cuyas conquistan buscan construir unos nuevos formatos novelísticos y poéticos.
Mientras todo eso ocurre, ella, con una madurez visible, producto de su intenso trabajo como creadora de realidades mágicas, sigue atenta a pescar en el mundo de la imaginación, los trazos exactos, que conduzcan a la construcción de una buena obra, que le sirva a la literatura para deleitar la mente del ávido lector, al tiempo que se incrementa en ella, una búsqueda transgresora.
Fercahino (Ketty María Cuello Fernández nació en San Juan del Cesar, La Guajira, el 26 de julio de 1950. Padres Carmen Catalina Fernández y Julio Alberto Cuello Gutiérrez)#RelatosFercahino
*Escritor, Periodista, Compositor, Productor Musical y Gestor Cultural para que el vallenato lograra una Categoría dentro del Premio Grammy Latino.